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Nick Mason nos esperaba en Londres, un tête-à-tête al que This Is Rock envió a nuestro colaborador José Abellán. Un encuentro entre el batería de Pink Floyd y el artífice del Animals Pink Floyd Magazine.

Cuando en Dingwalls, un pequeño pub londinense, Nick Mason subió al escenario junto a su nueva banda, Saucerful Of Secrets, nadie sabía lo que iba a ocurrir en esta primera aparición suya desde el Live 8 en 2005. Sólo se sabía la formación de la banda que acompañaría al batería de Pink Floyd, compuesta por Gary Kemp (Spandau Ballett), el bajista Guy Pratt (bajista de Pink Floyd y David Gilmour en los últimos tiempos), el guitarrista Lee Harris (Blockheads) y el teclista Dom Beken (The Orb).

Es la primera vez que un miembro de Pink Floyd interpreta música de los primeros años de la banda, que nunca ha sido tocada o publicada oficialmente post ‘The Dark Side Of The Moon’. ¿Por qué escoger este repertorio y no las canciones más famosas de la banda? Elegí este repertorio porque pienso que en cierta forma es más interesante para mí y los ‘Saucers’, y porque David (Gilmour) y Roger (Waters) las tocan muy bien. La gente espera que suenen exactamente como están en los discos. Lo fenomenal de la música de los inicios es que no pretendo tocarlas exactamente igual, quiero que esté el espíritu de las composiciones, y éste nos permite improvisar; queremos que la atmósfera sea correcta, pero las piezas están libres de ataduras, y así funcionen bien. Muchas tienen ya más 50 años, y podemos adaptarlas. Es como nos gusta hacerlas a mí y a la banda. Creo que en directo funcionan precisamente por eso, por ser diferentes e inusuales.

Le vi en Londres en uno de los primeros shows de Nick Mason’s Saucerful of Secrets (Half Moon, 23 mayo 2018), y lo vi mucho más cómodo, relajado y libre que en las megagiras donde todo está estudiado el milímetro, y a usted se le ve más serio. En la filmación de este show sonríe casi todo el tiempo y los músicos hablan entre ellos y usted. Half Monn… (sonríe). Estás muy en lo cierto, el problema es que cuando tocas con Pink Floyd en un gran estadio, con un gran escenario, intentas aproximarte todo lo posible a un espectáculo perfecto; así que dependes de efectos, vídeos, tocas con clic track, y debes aceptar que es casi imposible el contacto visual con el resto de la banda porque están muy lejos (ríe al decirlo), así que ésta es una vuelta a lo que significa tocar en una banda, tocando juntos, enviándose mensajes, indicando a uno u otro que se aproxima un cambio; y puedes improvisar; con solo una mirada decir que quieres repetir el estribillo, o hacer cualquier otra cosa. Así que la respuesta es que sí, me siento muy feliz.

Recientemente ha fallecido el batería de Rush, Neil Peart. ¿Qué piensa de su triste pérdida? Lamento enormemente no haber conocido a Neil Peart, le he seguido y he leído algunos de sus libros; además, ambos usamos en algún momento DW (marca de baterías), y tenía la esperanza de coincidir con él en algún momento, ya no puede suceder. Siento un respeto enorme hacia él como baterista, pero más aún como letrista; escribió sobre temas muy interesantes, tuvo una vida muy triste debido a un gran número de eventos, pero lo sobrellevó, y siguió adelante con ayuda de la música y de Rush. Así que definitivamente, es una triste pérdida.
Puedes seguir leyendo esta entrevista en el nuevo número de This Is Rock.

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