Foo Fighters rompen esquemas en su concierto para Amazon Music con una puesta en escena de 360º
Anoche, Foo Fighters ofrecieron una actuación carga de energía decibélica en formato de “combate enjaulado” para inaugurar la cuarta temporada de la serie Amazon Music Live, grabada en los East End Studios de Glendale, California, y emitida inmediatamente después de la retransmisión nacional de “Thursday Night Football” en Prime Video en los USA
En vez de presentarse en un escenario convencional el grupo actuó directamente a nivel del suelo, rodeado por completo de público, en un círculo reducido de amplificadores, cámaras y seguidores ubicados a escasos metros. La mayoría de las miradas estuvieron fijadas en el nuevo batería, Ilan Rubin, que demostró las razones de su elección.
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El público se dispuso formando un círculo en torno a la banda, mientras los cámaras se desplazaban entre la gente, filmando frecuentemente por encima de los hombros y entre los mástiles de las guitarras. El efecto fue una experiencia inmersiva de 360 grados que confirió al show una atmósfera espontánea y llena de energía: más parecida a un concierto clandestino en una nave industrial que a una retransmisión oficial en directo. La proximidad entre los músicos —y su permanente consciencia de estar siendo filmados desde todos los ángulos— dio a la performance un carácter casi documental.
Grohl se mostró completamente cómodo en estas condiciones. En repetidas ocasiones giró sobre sí mismo para encarar a los aficionados que tenía detrás, bramando las letras como si estuviera en un concierto en local de ensyo y no en el escenario de la multimillonaria Amazon.
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