Lee esta exclusiva con Lenny Kravitz en Apple Music 1 con Zane Lowe, sobre sus inicios, su amistad con Prince, Michael Jackson, Mick Jagger, Slash y mucho más…
Entrevista exclusiva de Lenny Kravitz en Apple Music 1 con Zane Lowe, con motivo de la salida de su nuevo álbum Blue Electric Light, que espero que sea de tu interés. Lenny habla de la aceptación de su sonido único: “durante muchos años me dijeron que no podía hacer lo que hacía. Cuando componía esa música, siempre me decían que no era lo bastante negra, que no era lo bastante blanca, que era demasiado rock o demasiado funky. La gente reconocía mi talento pero no quería que hiciera lo que hacía».
Rememora los años 90 anteriores a Internet, cuando se dio cuenta por primera vez de que era famoso, el hecho de convertirse en padre de su hija Zoe. También habla de cómo la inspiración para componer canciones le llega en mitad de la noche, lo primero que compró al conseguir un contrato discográfico y comparte sus recuerdos favoritos de su estrecha amistad con Prince y de haber trabajado con artistas como Michael Jackson. Slash y Mick Jagger.
Lenny Kravitz habla en Apple Music sobre la aceptación de su sonido único y sobre sentirse como en casa en París…
Me habían dicho durante muchos años que no podía hacer lo que estaba haciendo. Cuando componía esa música, siempre me decían que no era lo bastante negra, que no era lo bastante blanca, que era demasiado rock o demasiado funky. La gente reconocía mi talento, pero no querían que hiciera lo que estaba haciendo. Coge tu talento y haz esto. Esa es la forma, así es como funciona; esto es lo que hace un artista negro, estos son los éxitos de la radio, este es el sonido de lo que está pasando…
Me concedieron una reunión de cinco minutos en Virgin con una mujer llamada Nancy Jeffries, que era A&R allí. Entró, puso la cinta, puso ‘Let Love Rule’, puso esa canción, y luego dijo, espera un minuto, voy a buscar a alguien. Fue a buscar a Jeff Ayeroff, le puso la canción. Dijo, espera, voy a buscar a alguien más. Trajo a Jordan Harris. Los tres estaban sentados allí. Luego me pidieron que pusiera otras canciones que había hecho. Seguían escuchando y escribían notas, pasándolas de un lado a otro. Yo estaba allí sentado. Me dije, esta va a ser otra de esas situaciones. Me dijeron, ‘queremos ficharte, ¿quieres estar con nosotros?’. Y así fue como sucedió después de ser rechazado una y otra vez. Así que cuando el disco estuvo terminado y mezclado, llegó el momento de la promoción, ¿en qué lugar iba a encajar? ¿cómo iban a promocionarme? Era un poco confuso. Así que me enviaron a Europa, fui a Londres por primera vez. Fui también a París, Hamburgo y Amsterdam… Fue entonces cuando llegué a París por primera vez y me enamoré absolutamente de este lugar.
Lenny Kravitz dice que su nuevo álbum ‘Blue Electric Light’ ha sido el más divertido que ha grabado nunca…
Creo que nunca me he divertido tanto haciendo un disco como con ‘Blue Electric Light’. Estaban pasando varias cosas. El Covid estaba sucediendo, el mundo estaba cerrado y yo estaba en las Bahamas. Después de unas semanas tienes toda esa sensación de que no tienes que estar en ninguna parte, no tienes que hacer nada. No tenía que entregar algo o aparecer en algún sitio. Me metí realmente a vivir el momento. Todos hablamos de vivir el momento, de no pensar en lo que hemos hecho y en lo que vamos a hacer, sino de vivir el momento, que es el lugar en el que creo que muchos de nosotros queremos estar. Y pude ejercitarlo porque no existía pasado ni futuro. Era sólo ¡aquí estoy ahora! Sólo tengo que estar aquí. Estoy en medio de toda esta hermosa naturaleza y esta nueva música comenzó a llegarme. Íbamos al estudio todos los días.
Lenny Kravitz habla sobre cómo era su vida cuando fue padre por primera vez…
Zoe nació en casa, en el dormitorio, y en cuanto la vi pensé que nunca había sentido un amor así…
Es una locura. Te conviertes en padre y de repente tu sueño empieza a hacerse realidad.
Sí, todo sucedió al mismo tiempo: el matrimonio, una hija y esta carrera que comenzó, todo sucedió al mismo tiempo.
¿Qué supuso realmente esa época para ti como persona, como ser humano?
Era la vida viniendo a toda velocidad y era emocionante; todo eran nuevas experiencias, estar casado, tener una hija, conseguir este contrato discográfico que había querido desde que era adolescente y mi banda estaba viviendo con nosotros. Vivíamos en un loft en Broome Street, en el Soho; éramos ocho personas en colchonetas y colchones. Es como una comuna con almohadas por todas partes… Estaba loco con mi esposa, con mi hija, todos nosotros en un solo lugar, probablemente del tamaño de esta habitación. Fue todo un viaje. La madre de Zoe estaba grabando el programa de televisión en ese momento con Cosby, y ella estaba allí para apoyarme también, fue un momento hermoso para todos nosotros.
Echemos un vistazo rápido a los 90s, porque muchos artistas jóvenes están fascinados con esa época. Es una época anterior a Internet, en la que todo era ruidoso, la fama era real, el éxito era grande y no había Internet para dividir todo en este tipo de opinión democrática. Era una combinación loca de ruido excepcional, pero nadie podía llegar a él ni tocarlo. Todos lo veíamos pasivamente.
Fue hermoso. No lo sabía mientras estaba en ello, por supuesto, porque cuando estás en ello sólo estas a eso. Por supuesto, aún había el elemento místico, que es lo que me gusta. Todos los artistas con los que crecí tenían mística. A lo mejor salían en una revista y recuerdo que corría a los kioscos porque tal grupo salía ahí, sólo para conseguir una foto y verlos, y luego quizá salían en algún programa de televisión, como Don Kirshner’s Rock Concert o The Midnight Special, o lo que fuera. Así que crecí en esa época. Ahí estábamos en los años 90, y creo que nada es tan cool como en aquel momento; incluso las cosas simples como algunas viejas imágenes que estaba viendo de nuevo el otro día… eran de un concierto y documental que hice llamado “Alive from Planet Earth”, que me encanta, estábamos tocando y miraba al público y eran tan libres. Se me había olvidado aquello. Eran muy libres, la gente se subía a los hombros de los demás y simplemente bailaban, celebraban y no había ni un puto teléfono anterior a esa época, para que la gente pudiera simplemente estar en el momento de experimentar algo y no tener que demostrar que estaban allí.
La mayoría de nosotros ni siquiera nos molestábamos en llevar cámaras. ¿Quién quería eso en el bolsillo?. Todo lo que tenías era la entrada.
Sí y la MTV fue el catalizador. Es decir, estaba la radio y estaba la MTV.
¿Recuerdas cuándo te diste cuenta de que pasear por la calle en Nueva York no iba a volver a ser lo mismo?
Durante el segundo álbum ‘It Ain’t Over ‘Til It’s Over’. Se convirtió en un gran éxito pop y yo seguía cogiendo el tren para ir al estudio. Recuerdo que caminaba por Broome Street, que llevaba al túnel Holland, por lo que había mucho tráfico a ciertas horas, y todos los coches estaban allí atascados, y empecé a oír mis canciones, ese fue un gran momento para mí. Fue alucinante. A mí todavía me sorprende. Es como, wow, la gente está escuchando esto. O lo oía desde la ventana de un edificio; un día me subí al tren y la gente empezó a reaccionar, y ahí se acabó todo. Empecé a coger un taxi y luego me compré una furgoneta para ir al estudio. Fue una transición porque crecí en las calles de Nueva York y Los Ángeles y me encanta la calle y sigo en la calle. Ahí tuve que maniobrar de una manera diferente y tuve que ser consciente de las cosas, fue muy extraño tener que frenar mi forma natural de actuar.
Lenny Kravitz habla en Apple Music sobre sus recuerdos favoritos de Prince y Michael Jackson…
Pasamos mucho tiempo juntos (con Prince). Solía llamarme a altas horas de la noche para que me reuniera con él en un club para ir a tocar. Había público. Obviamente, sabiendo que íbamos a ir, esas eran noches geniales que eran tan libres y divertidas yendo a su casa a ver películas o comedias. Era muy, muy divertido. Tenía un sentido del humor asombroso. Pasaba el tiempo con él aquí en París, cuando tenía un apartamento antes de que yo tuviera mi casa, y yo salía con Vanessa Paradis por aquel entonces, e íbamos allí. Prince era muy competitivo. Jugaba muy bien al ping pong. Era muy bueno en el billar, baloncesto, con todo. Fuimos una noche y Vanessa también era muy buena en el billar y le pateo el trasero. Oh, mierda… eso fue duro para él. Íbamos juntos a visitar a Michael Jackson, me recogía e íbamos a ver a Michael al estudio y nos metíamos allí con él.
Es una locura, porque siempre se ha dicho que Prince y Michael eran archirivales.
Yo no sé nada de eso. Estoy seguro de que había algún tipo de competencia sana o lo que sea. Pero se trataba más de divertirse y bromear con él, en plan vamos a fastidiar a Michael.
Debes de haber alucinando. Debe haber habido un nivel saludable de síndrome del impostor sólo por estar en esa habitación por un segundo con a esas dos personas.
Esas son dos personas con las que crecí y con las que estudié y fueron mis maestros; yo estaba realmente sentado entre esos dos locos y me sentí muy normal. Los dos estaban completamente disfrazados, completamente maquillados, completamente peinados y yo estaba así tal cual, y Michael estaba fascinado con mis rastas. Era como, ¿qué haces, me tocas el pelo? Muy loco todo. Yo era una especie de salvaje y ellos estaban muy hechos, pero ambos eran personas realmente hermosas. Prince era muy generoso, siempre me hablaba de ciertas cosas que creía que yo debía saber y me enseñaba sobre el negocio. También se preocupaba por el ánimo de la gente. Recuerdo que una vez me senté en su coche durante dos horas para enseñarme un coche morado que había comprado. Fue ese Prowler Chrysler creo que se llamaba, y me llevó a verlo. Acababa de comprarlo y lo siguiente que recuerdo es que estuvimos sentados en el coche durante dos horas estudiando la Biblia, como si me estuviera dando una lección; nos respetábamos mucho como músicos y como seres humanos.
Lenny Kravitz habla sobre la producción para Michael Jackson
(Sobre la canción ‘I Can’t Make it (Another Day)’). La grabamos para el álbum ‘Invincible’ y, cuando terminamos, pensaron que era demasiado rock para ese disco por alguna razón. No sé, porque Michael siempre tenía un tema rockero guay. Ya fuera «Dirty Diana» o «Beat It «o lo que fuera. Michael dijo: «Vale, lo guardaré para el próximo disco». Me llamaba todo el tiempo. Recuerdo que estuvo viviendo en Oriente Medio durante un tiempo y me llamaba solo para hablar y luego hablábamos de la canción. Me decía, «me encanta esa canción. No puedo esperar a sacarla. Voy a ponerla en el próximo disco”. Y luego falleció e hicieron ese álbum de Michael y se metió en ese disco. Pero estoy muy orgulloso del tema, es precioso…
Él podía producirse a sí mismo. Era un ser humano que conocía todos los elementos del proceso creativo. Así que el ser una especie de influencia en ese entorno para él, debe haber sido …
Quería que escribiera una canción para él, que la produjera. Me dijo, tú invéntala. Tuve sólo unos días para hacerlo. No tenía nada. La grabé, terminé la pista, toqué los instrumentos y la compuse. Vino, le escribí la letra y había una voz de guía que le iba poniendo y se metió en la cabina de voz y me dijo: “Detenme cuando no lo haga bien”. Se acababa de aprender la canción, así que cualquiera no recordaría todo al principio. Y pensé, ¿cómo voy a pulsar este botón y decirle a Michael Jackson que deje de cantar? Pero nos pusimos a ello. Nos divertimos mucho. Me reí mucho con él. Súper divertido y perfeccionista y un regalo de experiencia. ¡Qué vida!
Lenny Kravitz cuenta a Apple Music cómo se reencontró con su compañero de instituto Slash…
Estaba en los American Music Awards. Fue después de mi primer álbum, no había empezado el segundo álbum todavía, y Guns N Roses estaban sentados frente a mí y veo a ese tipo y pienso que yo lo conozco. Lo miro, y digo, espera un minuto. Fuimos juntos al instituto y entonces ambos nos dimos cuenta, intercambiamos números y nos mantuvimos en contacto; él estaba terminando una gira en Inglaterra y dijo que quería hacer algo. Se subió al Concord, que llegó a Nueva York a las 8:30 de la mañana y vino a mi casa. Me hizo buscar un litro de vodka y una bolsa de hielo, y cuando llegó eran las 9:30 de la mañana. Acabé golpeando las puertas de los vecinos, conseguí el vodka y el hielo. Cogimos el tren a Hoboken, donde estaba el estudio, con el vodka, un par de guitarras, una bolsa de hielo que se derretía lentamente, llegamos al estudio y lo hicimos.
Lenny Kravitz cuenta a Apple Music las dos cosas que compró con su primer anticipo de la discográfica…
Crecí en las Bahamas, iba dos veces al año, mi madre siempre me llevaba a las Bahamas. Pasaba los veranos y los inviernos allí. Así que después de conseguir mi contrato discográfico, cuando solíamos recibir anticipos, compré una propiedad en las Bahamas porque pensé, bueno, si alguna vez gano otro dólar, al menos tengo un lugar donde ir. Puedo construir una choza. También compré una Harley-Davidson.
Ésas son las dos cosas que compré. Todavía las tengo y las Bahamas significan mucho para mí. Es un lugar donde puedo ser yo mismo. Soy de ahí, la gente de las Bahamas es muy especial, mis raíces están allí y me siento muy a gusto. Viví 15 años en una caravana Airstream. Me encantaba salir de gira e ir a un lugar con un espacio muy limitado. Sólo tienes espacio para lo que realmente necesitas.
Lenny Kravitz habla sobre cómo le llega la inspiración para componer en mitad de la noche…
Cuando estoy haciendo los discos, la mayor parte de la composición ocurre mientras duermo. Sólo soy una antena, así que recibo lo que se me transmite, y tiende a suceder entre las 3:00 y las 5:00 AM. Sea el vórtice que sea, se abre entre esas horas, lo oigo y lo escucho como un disco sonando en mi cabeza. Entonces tengo que despertarme, coger el teléfono, coger una guitarra. Muchas veces ni siquiera cojo la guitarra. Simplemente empiezo a tararear la melodía y luego tarareo la estructura de acordes. A veces cojo una guitarra y espero haber anotado suficiente información para reconocerla cuando me despierte. A veces me despierto y me pregunto qué coño es esto. Es horrible, pero así es como funciona. Entonces me despierto, camino hacia el estudio y empiezo a hacer esta cosa que me han dado.
Pienso en ti como colaborador en los discos y como alguien que puede tocar todo por sí mismo. Has tenido una vida tan rica de colaboraciones con la gente. ¿Hay alguna que te llame la atención y que hayas sentido como un gran punto de inflexión para ti, un gran aprendizaje?
Mick Jagger. Dios me lo dio todo. Sí, vino a mi casa en Miami y yo había escrito el tema. Tenía un poco de melodía, pero no quería terminarla. Quería que se le ocurrieran especialmente los versos. Así que le puse el tema. Le canté la melodía básica del estribillo y me dijo, vale, ahora vuelvo. Me pidió una libreta y un bolígrafo y se fue a un pequeño rincón de mi casa durante unos 30 minutos. Volvió con la letra. Ya lo tenía. Así que le dije, está bien, ¿por qué no vas allí y haces la voz? En su mente él estaba haciendo una voz simulada. Era sólo una voz guía. Así que se fue allí y yo estaba sentado detrás de la mea de sonido. Empezó a cantar y Craig estaba sentado a mi lado lo miré y le dije. “mierda, suena exactamente como Mick Jagger”. De repente, me impresionó oír su voz en el estudio a través del micrófono en esa canción que estábamos escribiendo. Entonces él salió e hizo una toma y dice: «sí, eso es genial, pero voy a conseguir la voz buena luego». Y yo pensaba, ¿estás loco? Esa voz era increíble, sensación, tono, ritmo…todo. Día tras día, tras día ,tras día, seguía cantando una y otra y otra vez.
Sube el Volumen // THIS IS ROCK + Apple Music
¿Sabes lo que estaba buscando?
Tal vez todo sucedió demasiado rápido…No sé qué estaba pensando. Quizá no le gustó tanto y discutimos un poco, pero así es mi hombre. Le respeto mucho y le quiero mucho. Ha sido un gran amigo durante todos estos años. Pero dije, ese vocal es increíble. Finalmente después de hacerlo 10 veces, finalmente cedió y pensé, ¡gracias a Dios!. Esa es la voz que se escucha en el disco, sólo hecha con una toma.
Lenny Kravitz habla sobre por qué hace ejercicio con su ropa de calle…
No me importa lo que llevo puesto. He hecho ejercicio con todo. Si estoy haciendo cardio, no me voy a poner algo con lo que pueda sudar, pero si estoy levantando pesas, no sudo tanto. Me presento con lo que sea. Es curioso porque también entreno con atletas profesionales, jugadores de la NFL, de las grandes ligas, jugadores de béisbol, luchadores, boxeadores. Me ven llegar con unos vaqueros, unas botas y una de esas camisetas de las que habla mi hija, que son brillantes, y se ríen. Piensan, «vamos a entrenar con él llevando eso». Y entonces voy y lo doy todo.
Apple Music 1_Zane Lowe
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