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El consagrado álbum multiplatino ‘Moondance’ de Van Morrison se reedita en 3LP remezclado por Steven Wilson, el productor Elliot Scheiner recuerda aquellas sesiones.

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El consagrado álbum multiplatino ‘Moondance’ de Van Morrison se reedita en 3LP remezclado por Steven Wilson, el productor Elliot Scheiner recuerda aquellas sesiones. Publicado en 1979 está considerado como uno de los mejores álbumes de todos los tiempos. Hace diez años, la edición de lujo del disco fue lanzada con gran éxito, con críticos y fans disfrutando del contexto brindado por canciones inéditas de la sesión de grabación. Aquella edición extendía la mirada más allá de la cortina, hacia la “creación” de una obra maestra.

El clásico certificado platino por la RIAA fue escrito y compuesto por el propio Van Morrison, y a menudo se le atribuye el mérito de haber marcado el comienzo de la era del “soft rock”. Los éxitos de la colección incluyen “Come Running”, “Into the Mystic”, “Crazy Love” y, por supuesto, la canción que da título al álbum; “Moondance”.

El productor Elliot Scheiner cuenta en primera persona cómo fue su experiencia produciendo y mezclando este álbum: «En 1969 yo era un joven ingeniero novato que trabajaba en A&R Recording en la ciudad de Nueva York. En ese moment era considerado el mejor estudio de la ciudad y tal vez incluso del país. En aquellos años, los ingenieros de planta solían saber la noche anterior lo que iban a hacer al día siguiente. Recuerdo que pasé por la oficina para averiguar mi horario para el día siguiente y vi que iba a trabajar con Van Morrison la tarde siguiente. Fue muy emocionante para mí porque iba a ser el primer gran proyecto de mi carrera”.

«Estábamos grabando en una de las salas más nuevas de A&R, Studio R1, ubicada en West 48th Street, teníamos una nueva mesa Telefunken allí y estaba ansioso por hacer este proyecto en esa consola. Este equipo terminó siendo uno de mis favoritos porque en su mayor parte fue construido a mano y sonaba diferente a cualquier otra consola en la que había trabajado. Llegué al estudio dos horas antes del inicio para guiar el montaje de la banda en la sala. El estudio fue moldeado y envuelto alrededor de la sala de control”.

«El primer músico en llegar fue el batería Gary Malabar. Poco después empezó a llegar el resto de la banda. Entraron el bajista John Klingberg y el guitarrista John Platania y les mostré dónde estarían sentados. El resto de la banda entró con Van. Esta no era la primera sesión que hacían para el álbum y creo que en ese momento yo era el tercer ingeniero en trabajar en esto. Estoy bastante seguro de que la primera canción que grabamos ese día fue ‘Come Runnin». Todos tocaron en vivo, lo que significaba que Van y la banda interpretaron la canción en la misma sala, sin sobregrabaciones”.

«Había dos cabinas insonorizadas separadas por una plataforma elevada donde puse la batería en el centro, el bajo a la izquierda y la guitarra a la derecha. En la cabina de la derecha estaba Van tocando la guitarra y cantando y en la cabina izquierda estaban las tres coristas Judy Clay, Emily Houston y Jackie Verdell. Frente a esa cabina izquierda estaba Jeff Labes tocando el piano, Fender Rhodes o B-3. La sección de trompeta estaba compuesta por Jack Shroer y Collin Tilton. Estaban situados en el área del codo de la habitación con paneles iso, llamados gobos, directamente frente a ellos. Honestamente, no recuerdo cuántas canciones grabamos en esa habitación, pero después de terminar todas las pistas, hubo un descanso de quizás uno o dos meses antes de comenzar a mezclar».

«El álbum fue grabado en una cinta analógica de 1” con 8 pistas. Ese era el formato más nuevo en ese momento y lo más innovador, lo creas o no. Las ocho pistas quedaron relegadas a una pista de batería, una para el bajo, otra para la guitarra, otra para los teclados, la voz de Van en una, la guitarra de Van en una, los fondos en una y la última para los vientos. Básicamente todos los instrumentos fueron grabados en mono”.

«La semana antes de Navidad de 1969 recibí una llamada de Van diciendo que Warner Brothers necesitaba el álbum mezclado y listo para su lanzamiento antes de fin de año. También dijo que planeaba pasar las vacaciones con su familia en Woodstock. Me dijo que siguiera adelante y mezclara el disco y que solo me asegurara de enviarle copias en cinta de las mezclas una vez que terminara. Eso fue muy importante para mí considerando que él era el artista de primer nombre para el que estaba mezclando».

«La mayoría de los ingenieros se sienten inseguros de su trabajo y yo no fui diferente. Decidí llamar a Gary Malabar, quien creo que vivía en la ciudad de Nueva York en ese momento y le pregunté si le importaría venir mientras yo mezclaba el álbum para ofrecerme consejos y opiniones. Parecía muy feliz ante la perspectiva de participar en la etapa final de este álbum. Su presencia ayudó a aliviar mis inseguridades”.

«Mezclé el álbum en el otro edificio de A&R en la 7ª Avenida. Anteriormente fueron los estudios de Columbia donde Frank Sinatra grabó muchos de sus álbumes. Estábamos trabajando en una pequeña sala de mezclas de 8 pistas conocida como Mix II. Tenía una consola de mezclas muy pequeña con grandes faders giratorios. La salida de la consola era estéreo y tengo un vago recuerdo de que también la mezclamos en mono. La mayoría, si no todas, las estaciones de radio AM reproducían mono».

«Gary y yo pasamos entre ocho y diez días mezclando el álbum y luego enviamos copias en cinta a Van para su aprobación. Nunca supe de él si pensaba que las mezclas eran buenas, pero justo antes de Año Nuevo recibí un mensaje para masterizar el álbum. A&R tenía una sala de masterización estéreo que era bastante nueva. Bob Ludwig había dejado recientemente A&R para abrir su propio centro de masterización y Dave Crawford había ocupado su lugar».

«Recuerdo claramente el día que masterizamos, escuchando el álbum por primera vez editado juntos en la secuencia final. Pensé que sonaba bastante bien pero me preguntaba si sería un éxito. Según los estándares de aquellos años, realmente no fue un gran éxito. Fue un álbum brillante y aclamado por la crítica…. y fundamental para muchos. Ciertamente para mí. Es una hermosa colección de canciones con excelentes voces y excelente interpretación».

«Hace unos diez años me pidieron que remezclara el disco para añadir una versión de alta definición con sonido envolvente 5.1. Pensé que no sería fácil tomar un master de 8 pistas y hacer una versión 5.1, pero es sorprendente lo genial que resultó. Espero que haya un buen número de personas tengan la oportunidad de escuchar esta nueva versión. Después de 44 años, esta música todavía se mantiene y te atrapa en cuanto empieza a sonar»
Elliot Scheiner

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